Estos subsidios son ayudas financieras del gobierno para ayudar a las personas a comprar su primera vivienda, haciendo la propiedad de una vivienda más accesible. Los defensores argumentan que ayuda a las personas a costear su primera vivienda y promueve la propiedad de vivienda. Los opositores argumentan que distorsiona el mercado de viviendas y podría llevar a precios más altos.